24º Domingo del Tiempo Ordinario

09-11-2022Weekly Reflection© LPi

En cada uno de los domingos pasados, la Palabra de Dios nos invitaba a ser mejores seguidores de Jesús. La liturgia de hoy no se queda atrás, hay que seguir con mucho entusiasmo y fidelidad su enseñanza. Atrévete, nos dirá el Señor, levántate y ponte en camino hacia el Padre. El Papa Francisco en sus excelentes catequesis nos exhorta a lo siguiente: “Dios espera siempre que reanudemos el viaje, nos espera con paciencia, nos ve cuando todavía estamos lejos, sale a nuestro encuentro, nos abraza, nos besa, nos perdona. ¡Así es Dios! ¡Así es nuestro Padre! Y su perdón borra el pasado y nos regenera en el amor”.

¿Has experimentado el perdón de Dios? Me imagino que sí. Porque si has perdonado a alguien que te ha ofendido, de seguro que has gozado del perdón de Dios en tu vida. El Evangelio, en este domingo, es rico en alegría y perdón. Las cien ovejas y la búsqueda de una sola que estaba perdida: “Alégrense conmigo, porque he encontrado la oveja que se me había perdido” (Lucas 15,6). La mujer que pierde una moneda de las diez que tiene, y su alegría de encontrarla: “Alégrense conmigo, porque hallé la moneda que se me había perdido” (Lucas 15,9). Estas dos parábolas indican la iniciativa de Dios, quien busca, encuentra y se alegra. En la tercera parábola, la del hijo pródigo, la iniciativa de Dios se basa en la libertad y el respeto por el ser humano.

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